Reportaje

Averías más frecuentes por falta de uso

Qué hacer si no arranca el coche (2)

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07 de abril, 2020

Igual que cuando nos escayolan una pierna perdemos mucha masa muscular y luego hay que rehabilitar músculos que no tenían nada que ver con la fractura, muchas piezas del automóvil se estropean por no usarse. Vamos a ver las principales.

Pasar parado mucho tiempo no es nada recomendable para nuestro coche. En principio, estar un mes o dos sin moverse no supone ningún riesgo, salvo para la batería, que seguramente se descargue. Sin embargo, estar más de un año sí empieza a aumentar el riesgo de sufrir averías y debemos tener una serie de cuidados antes de volverlo a poner en marcha. Tampoco está mal conocer los elementos que más sufren para, por ejemplo, evitar que se deformen los neumáticos o se queden trabados los frenos.

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Los que nos movemos en el mundillo de los clásicos y de la segunda mano lo sabemos bien: al igual que uno debe hacer ejercicio regularmente para no anquilosarse, los automóviles han de encenderse con cierta frecuencia, hay que hacerlos rodar para que no se formen planos en las ruedas ni en los cojinetes, que circule el aceite por el motor para que no se oxiden los cilindros…

Un coche inmóvil crea planos en los neumáticos. Rodar con ellos puede ocasionar el desprendimiento de la banda de rodadura.

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Aunque no necesites mover tu coche (o tengas un clásico en casa que apenas puedes «sacar de paseo» por falta de tiempo), es conveniente que lo pongas en marcha y actives sus distintos accesorios para que no se estropeen.  Así garantizamos que, cuando por fin podamos rodar con él, esté en perfecto estado.

Aquí va una lista de algunos elementos que sufren mucho por falta de uso.

Los neumáticos

Si vas a tener tu coche parado durante una larga temporada, lo ideal es que lo dejes apoyado en unas borriquetas para que el peso no deforme los neumáticos. Si no es posible, lo mejor es que hinches las ruedas con 1,5 bar más de presión que la recomendada por el fabricante. Así, la cubierta no queda tan plana apoyada en el suelo y no se deforma tanto. De lo contrario, cuando salgas a rodar notarás vibraciones y ruidos en la dirección.

El aire acondicionado

Este elemento es particularmente crítico. Mucha gente apenas lo usa 4 o 5 días en verano; es un grave error, por un lado, porque es el método más eficaz para desempañar los cristales en invierno y, por otro, porque el sistema tiene elementos que precisan que circule el fluido refrigénico (el gas que enfría) para mantenerse lubricados. El compresor, el filtro y todas las juntas de estanqueidad necesitan que pongamos en marcha el aire acondicionado al menos una vez al mes durante unos minutos para «estar en forma».

Los elevalunas eléctricos

Es un accesorio que, personalmente, me parece de los más prescindibles del automóvil: añaden peso, averías, coste… y apenas aportan utilidad (de hecho, en muchos coches apenas se abren las ventanillas, salvo la del conductor para pagar los peajes y parkings). La mayor parte de las averías en los sistemas eléctricos de los elevalunas están originadas «por los extremos»: desgastes por su excesivo uso -el famoso caso del patín de plástico que se rompe y se cae la ventanilla de golpe- o problemas en el motor eléctrico por óxido debido a la falta de uso. En la caja que forma la puerta, donde va montado el motor del elevalunas, siempre hay humedad de la lluvia, etc. Si no se usa con frecuencia, el sistema se oxida y empiezan los fallos.

El motor

Los segmentos tienden a quedarse agarrotados contra sus ranuras en los pistones.

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Aunque podamos pensar que un motor no se desgasta si no lo ponemos en marcha, la realidad es que los propulsores necesitan funcionar con cierta periodicidad para no estropearse. Como aficionado a los clásicos, no es la primera vez que me llaman para arrancar un coche que lleva 20 años tirado en un garaje, en una granja… y, aunque la mayoría acaban encendiéndose con un poco de gasolina limpia y unas pinzas de arranque, antes hay que realizar una serie de comprobaciones.

Al no girar el motor, el aceite se escurre hacia el cárter, dejando las paredes de los cilindros y los segmentos de los pistones completamente secos. Esto genera óxido en el cilindro y que los aros de los pistones se queden pegados. Antes de intentar encenderlo, suelo echar un poco de petróleo de las lámparas antiguas por el agujero de la bujía (o de un calentador, si es diésel) y giro a mano la mecánica para limpiarla un poco por dentro y despegar los segmentos.  Dejo secar el conjunto, echo un poco de aceite para motores de dos tiempos directamente en el cilindro y lo dejo un rato. Luego, intento encenderlo. Es una liturgia algo engorrosa, pero necesaria para resucitar un propulsor sin partir una biela en el primer intento. Todo esto «sobraría» si el motor se hubiese puesto en marcha al menos una vez al mes.

Circuito de refrigeración

Las galerías por las que circula el refrigerante se oxidan y obstruyen por la inactividad.

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En el motor de un coche hay un sistema para enfriar la mecánica. En los refrigerados por aire no hay ningún problema, pero en la inmensa mayoría de propulsores, que son refrigerados por agua, los períodos de inactividad pueden provocar averías gravísimas. Además de un desgaste mayor en los manguitos de agua (vamos a llamarle agua, aunque en realidad sea anticongelante) al resecarse, la bomba de agua se puede agarrotar por el óxido, el termostato, quedarse pegado por falta de uso, y el radiador, obstruirse por irse decantando en él todas las partículas que suele llevar el agua en suspensión.

Si vas a comprar un coche que apenas se ha utilizado, mi consejo es que antes de nada hagas un buen «flushing» (lavado interno y purgado) del circuito de refrigeración para evitar averías graves, como un gripado o una culata doblada. Después, pon un termostato y bomba de agua nuevos.

Fugas de aceite

Las gomas, juntas, retenes… todos los elementos que garantizan la estanqueidad del motor necesitan estar en contacto con el aceite para mantenerse «hidratados». Cuando un propulsor pasa mucho tiempo parado, las gomas se resecan y empiezan a agrietarse. También encogen un poco: ya tenemos problemas de fugas. Aunque no lo parezca, las menos graves son las fugas hacia el exterior, porque ésas las vemos y nos ponen alerta. El problema son las fugas internas, principalmente, por los retenes de las guías de válvulas. Si al poner en marcha el coche aceleramos y al soltar el pedal vemos un humo azulado en el escape… ojo.

Problemas de distribución y «taqueteo»

La mayoría de los motores actuales montan taqués hidráulicos para accionar las válvulas. Funcionan de maravilla y evitan muchos desgastes. Como su nombre indica, trabajan con aceite, por lo que si no se usa con frecuencia el coche, se desceban y pierden su funcionalidad. Si al encender el vehículo oímos un «taca-taca-taca-taca» en la parte alta del motor, debemos esperar unos 5 minutos para que se ceben y que el ruido desaparezca. Si transcurrido un tiempo prudencial el ruido persiste… alguno de los taqués «ha muerto» por falta de uso.

La dirección asistida

Actualmente, la mayoría de los sistemas de asistencia a la dirección son eléctricos, pero, hasta ahora, eran hidráulicos. Lo mismo de siempre: si el aceite no circula con frecuencia por la cremallera de dirección y la bomba, ambos elementos se pueden estropear.

Sistema de frenos

El sistema de frenos suele ser una fuente de problemas si no se usa periódicamente.

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Éste es un punto muy crítico. La mayoría de la gente no sabe que el líquido de frenos hay que cambiarlo «sí o sí» cada dos años, hagas cero o un millón de kilómetros. El motivo es que este líquido está compuesto por un éter que es hidrófilo, por lo que absorbe el agua que hay en la atmósfera y poco a poco se va «hidratando». La presencia de agua en el circuito de frenos provoca dos problemas:

  • Reduce la temperatura a la que el líquido de frenos empieza a hervir. La ebullición de este líquido provoca burbujas que se comprimen y alargan el recorrido del pedal, llegando incluso a dejar de frenar. Es lo que se conoce como «fadding» del líquido de frenos.
  • Los elementos del sistema de frenado se pueden oxidar, no tanto las pinzas de freno (por cierto, no se llaman calibradores, se llaman pinzas de freno. Calibrador es una mala traducción de «caliper», el nombre que tienen en inglés), sino los grupos hidráulicos de los sistemas de ABS, cuya sustitución es muy cara.

Caja de cambios y diferenciales

Al igual que el motor, la caja de cambios y los diferenciales necesitan aceite para mantenerse limpios y lubricados. Largos períodos de inactividad hacen que se oxide la parte de los piñones, sincronizadores, horquillas (no están sumergidas en el aceite)… y que los retenes y juntas pierdan estanqueidad.

Bombas de agua, lavaparabrisas y lavafaros

Algunos detergentes que se usan para el lavaparabrisas forman un «barrillo» que acaba obstruyendo la bomba que pulveriza el agua en el cristal. Por otro lado, si no se usa con frecuencia, también se oxida el pequeño motor eléctrico que lleva la bomba; se agarrota. Si al comprar un coche de segunda mano accionamos el mando del lavaparabrisas, no echa agua y el vaso sí tiene líquido, lo más probable es que falle la bomba por este motivo. Comprueba el fusible; cuando un motor eléctrico se agarrota, al accionarlo crea un elevado consumo eléctrico que funde el fusible.

Los Citroën hidroneumáticos y la inactividad

Los modelos de Citroën con suspensión hidroneumática no llevan nada bien el pasar demasiado tiempo sin moverse.

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Unos coches especialmente sensibles a los períodos de inactividad son los Citroën con sistema hidroneumático. Los más modernos sólo tienen hidroneumática la suspensión, pero en los más veteranos esta maravilla técnica (una obra de arte de la ingeniería) gestiona la suspensión, la dirección, los frenos e incluso el cambio semi-automático.

Como en todo sistema hidráulico, la falta de uso provoca que, por falta de lubricación, se genere óxido en algunos elementos (como la válvula reguladora, la bomba, los vástagos de los «amortiguadores»,etc). Pero lo más grave son las pérdidas de estanqueidad y las fugas de líquido, que pueden ser un verdadero calvario en estos coches.

He de romper una lanza en favor de este sistema, que es tremendamente fiable y tiene un mantenimiento barato, pero necesita de ciertos cuidados. Si no se siguen las pautas de manera estricta empieza el calvario… y es una pena, porque cuando funciona no hay nada que se le parezca en el mundo.

Como ves, no siempre un coche que ha recorrido pocos kilómetros es una ganga. Lo ideal es que haya cubierto pocos kilómetros, pero de manera frecuente. Si lleva tiempo inactivo, te recomiendo que seas prudente.

Comentarios

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  • Alejandra de la Cerda Ramirez

    Tengo una camioneta lincoln con 41000 kms, se le hicieron todos los mentenimientos y la agencia me decia que no habia ningun problema. Es posible que al dia de hoy en una revision me digan que el motor ya no sirve? Como es que la camioneta no activo ninguna alarma de que habia un problema?

  • Axel Vega

    Buenas espero que esten bien.
    Se que esto no es especifico a mi problema, lo que pasa es mi auto automatico nissan presenta una fuerte sacudida cuando intento cambiar de marcha de N a D, que podria ser? Espero sus respuestas y de ante mano gracias.

  • Juan Luis Arboleida

    En mi caso tengo un cutlass 94 y no lo estoy usando mucho , pero como dice el mensaje hay que estar prendiendolo de vez en cuando ,gracias es útil el mensaje

  • Adolfo

    Hola, quien me puede ayudar? Voy a estar una temporada larga de seis meses sin usar mi Golf 7.
    Que le puede pasar al sistema electrónico? Hay alguna solución para evitar la desprogramación de los mismos? Añadir una batería auxiliar en paralelo para evitarlo o por el contrario, desconectar el negativo de la batería para evitar su descarga podría ser una solución?
    Gracias de antemano por la ayuda

    • Rubén Fidalgo

      Hola, lo mejor es conectar un mantenedor de corriente que se encargará de cargar y descargar la batería para mantenerlo a tono. Si no es posible, mejor desconectar el negativo y que al menos la batería se conserve bien, porque si se descarga por completo, además de perder la programación se estropeará la batería.

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