Publirreportaje: Volvo DRIVe
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Autor: Autocasión
06 de marzo, 2009
Más allá de la creciente corriente ecológica en la automoción, Volvo lleva 30 años innovando en medio ambiente. Ya en los 70 lanzó su primer catalizador con sonda Lambda, tecnología que en aquellos tiempos reducía las emisiones un 85%. Hoy 7 de sus 10 modelos suman eficientes versiones DRIVe.
Más allá de la creciente corriente ecológica en la automoción, Volvo lleva 30 años innovando en medio ambiente. Ya en los 70 lanzó su primer catalizador con sonda Lambda, tecnología que en aquellos tiempos reducía las emisiones un 85%. Hoy 7 de sus 10 modelos suman eficientes versiones DRIVe.
El Salón de Ginebra ha sido el escenario elegido por la prestigiosa firma sueca para dar a conocer su nueva generación de modelos medioambientalmente saludables DRIVe.
Una familia ideada para ahorrar combustible y, paralelamente, emisiones contaminantes. Los DRIVe incorporan un motor diésel convencional, un cambio manual optimizado para reducir consumo y adaptaciones para mermar la resistencia a la rodadura y al aire. Cmoo resultado, exhiben los mejores niveles de emisión de CO2 en sus respectivas categorías.
Volvo C30, 3,9 l/100km, 104 gr/km
Volvo S40, 4,0 l/100km, 107 gr/km
Volvo V50, 4,0 l/100km, 107 gr/km
Volvo V70, 4,9 l/100km, 129 gr/km
Volvo S80, 4,9 l/100km, 129 gr/km
Volvo XC60, 6,0 l/100km, 159 gr/km
Volvo XC70, 6,0 l/100km, 159 gr/km
Tres niveles DRIVe: 120, 140, 160 gr/km
La gama Volvo DRIVe se estructura en 3 categorías vinculadas a otros tantos niveles de emisiones: 120, 140 y 160 gr/km. Como se aprecia, también se corresponden con los tramos fiscales especiales de CO2 y con otros incentivos gubernamentales presentes en algunos países europeos para los vehículos menos contaminantes.
A partir de la primavera de 2009, los C30, S40 y V50 1.6D DRIVe se ofrecerán con función de arranque/parada para recortar emisiones a sólo 104 gr/km en el primero -cumple con los niveles europeos más bajos exigidos por la Ecotasa, que establece un tope de 105 gr/km-, y a 107 gr/km en los S40 y V50.
Para contener emisiones de dióxido de carbono hasta niveles tan extremadamente bajos, las nuevas versiones DRIVe de los C30, S40 y V50 incorporan 2 ingenios. La primera es la citada función de arranque/parada, que desconecta el motor cuando el vehículo se deteniene, por ejemplo en un semáforo o en retenciones de tráfico: si el conductor coloca la palanca de cambio en punto muerto y suelta el embrague con el vehículo detenido el motor se apaga. Al pisar el embrague el motor arranca de nuevo, lo que reduce reduce el consumo y las emisiones entre un 4 y un 5% en condiciones de tráfico mixto. El arranque/parada resulta especialmente eficaz en circulación urbana, con un ahorro que puede legar al 8%.
Con el vehículo detenido y el motor apagado algunos sistemas electrónicos, como el aire acondicionado, pasan a modo de espera con el fin de ahorrar más combustible. Ahora bien, el sistema supervisa constantemente el nivel de confort y reactiva por sí mismo los equipos pertinentes si, por ejemplo, detecta un aumento de temperatura en el habitáculo, y no establece limitaciones al equipo de sonido u otros que el cliente desee mantener conectados.
El dispositivo de supervisión, exclusivo de Volvo Cars, se apoya en una pequeña batería adicional que complementa la más grande, optimizada para soportar 175.000 ciclos de arranque/parada. Gracias a dicha batería los DRIVe realizan un arranque especialmente rápido y suave, y el equipo de sonido, por ejemplo, permanece inalterable cuando se activa el motor de arranque.
El conductor recibe información permanente sobre el estado del sistema a través de la pantalla de información del vehículo. La función de arranque/parada se puede activar o desactivar en un botón situado en la consola -por defecto la función está activada-. En el futuro, este botón regulará otros sistemas, como los parámetros de ahorro DRIVe para obtener un rendimiento del combustible especialmente eficaz.
La segunda característica de los C30, S40 y V50 DRIVe 1.6D con arranque/parada se conoce como carga regenerativa: una función que recarga la batería al soltar el acelerador o pisar el freno con una marcha engranada. En estas cirunstancias el alternador aprovecha la energía cinética del vehículo y no emplea combustible extra como fuente energética cuando el nivel de la batería desciende. Esta función permite un ahorro de un 2 a 3%.
V70 y S80: por debajo de 140 gr/km
Por primera vez los Volvo V70 y S80 están disponibles en versión DRIVe. Van equipados con el mismo grupo motopropulsor –motor diésel 1.6 y cambio manual– que los más anteriores, pero con un software de motor específicamente adaptado y relaciones de transmisión diferentes en las marchas 3ª, 4ª y 5ª. Todo ello reduce considerablemente consumo y emisiones: en el V70 baja a 4,9 litros a los 100 km, con 129 gr/km, una mejora del 18% comparado con el 2.0D. El S80 baja hasta 4,9 litros a los 100 km y 129 gr/km, una mejora del 15% comparado con su equivalente 2.0D.
Pero hay otros factores que contribuyen a reducir el consumo en los DRIVe. Por ejemplo los neumáticos diseñados especialmente para mermar la resistencia a la rodadura, sus llantas y tapacubos aerodinámicos, un indicador para
cambiar de marcha en el momeno óptimo -situado en la instrumentación, a la vista permanente del conductor-, ciertos aditamentos externos de carrocería para aminorar la resistencia al avance -spoilers, alerones específicos…- o, si ir más lejos, una bomba eléctrica de la dirección que suministra la servoasistencia exacta requerida por el conductor en cada instante. Por su parte, el V70 DRIVe añade medidas específicas para reducir la resistencia al aire: parrilla cubierta y chasis rebajado -20 mm el tren delantero y 15 el trasero-.
XC60 y XC70: menos de 160 gr/km
Los gamas 2010 de los todocaminos Volvo XC60 y XC70 también se ampliarán con nuevas alternativas DRIVe, ambas de tracción delantera. Se combinan con el motor de gasóleo 2.4D y cifran emisiones en 159 gr/km a partir de un consumo líder en la categoría: 6,0 litros cada 100 km.
Estos vehículos contemplan otras mejoras como una reducción en la fricción y las pérdidas de bombeo del motor. También disminuyen la presión en los conductos de admisión y escape. Su presión de inyección aumenta con la última generación de bombas de alta presión en el sistema common rail, perfeccionada con dispositivos piezoeléctricos y una nueva generación de software de control. El resultado es una compresión menor y una combustión más eficaz. Adicionalmente optimizan el turbocompresor para lograr mayor par motor a menor número de revoluciones y modifican las relaciones de la transmisión.
Eficacia mejorada en toda la gama
Las mejoras en las propiedades medioambientales de los modelos Volvo no se limitarán sin embargo a las versiones DRIVe: las medidas que reducen el consumo de combustible también beneficiarán al resto de la gama. Por ejemplo, todas las transmisiones automáticas serán entre un 5 y un 7% más eficaces en las versiones que se lancen en los próximos 2 años.
La marca se ha propuesto ofrecer vehículos con las emisiones de CO2 más bajas de cada categoría. DRIVe es el símbolo de este proceso. Los vehículos que porten su insignia serán aquellos que mayores progresos aglutinen, pero la estrategia de eficacia de consumo comprenderá progresivamente todos los productos y transmisiones del fabricante sueco. Al ofrecer una gama de productos diversificada, con alternativas muy económicas y otras más potentes, el cliente puede elegir su huella medioambiental.
Rendimiento, emisiones de CO2 y consumo de combustible en modelos Volvo DRIVe para el año 2010:
Modelo Motor Potencia CO2 Consumo
C30 Start/Stop 1.6D 109 CV/240 Nm 104 gr/km 3,9 l/100 km
S40 Start/Stop 1.6D 109 CV/240 Nm 107 gr/km 4,0 l/100 km
V50 Start/Stop 1.6D 109 CV/240 Nm 107 gr/km 4,0 l/100 km
V70 1.6D 109 CV/240 Nm 129 gr/km 4,9 l/100 km
S80 1.6D 109 CV/240 Nm 129 gr/km 4,9 l/100 km
XC60 2.4D 175 CV/420 Nm 159 gr/km 6,0 l/100 km
XC70 2.4D 175 CV/420 Nm 159 gr/km 6,0 l/100 km
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