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Mercedes SLR Stirling Moss

Mercedes SLR Stirling Moss

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22 de diciembre, 2008

Cuesta 750.000 euros y probablemente es la creación más sublime en la historia de la marca.

Cuesta 750.000 euros y probablemente es la creación más sublime en la historia de la marca.

Mercedes impulsa la gama SLR incorporando una variante roadster aún más extrema y espectacular. Se trata de un speedster carente de techo capaz de catapultarse de 0 a 100 km/h en 3,5 segundos, progresando desde ahí hasta un máximo de 350 km/h. Hasta finales de 2009, momento en que cesará la fabricación -arranca en enero-, la marca fabricará 75 unidades a un precio cada una de 750.000 euros.

El coche recibe el nombre de uno de los pilotos de la marca y de la competición más legendarios de todos los tiempos, el británico Stirling Moss, quien condujo a la victoria en la Mille Miglia de 1955 el SLR 300 original. Por aquel entonces, el SLR 300 cosechaba victoria tras victoria, también en carreras de leyenda como la Eifel, la Targa Florio o la Tourist Trophy, también con Juan Manual Fangio y Karl Kling al volante.

Fiel al concepto original, el nuevo SLR Stirling Moss carece de techo, parabrisas -frente a los dos únicos pasajeros figuran unos pequeños deflectores- o ventanillas, si bien la nueva estrella de plata atesora una tecnología de ultimísima generación.

No faltan dos abultadas entradas de aire traseras que ofician de barras antivuelco detrás de los dos únicos asientos. Su estampa, en todo caso, enlaza estrechamente con la del coche original, pero se distancia por completo de otros modelos contemporáneos -con el resto de SLR comparte el motor 5.5 V8 Kompressor en su versión de 650 CV, el cambio automático y secuencial de cinco marchas con levas en el volante, los bajos carenados y el estractor trasero que ejerce una considerable fuerza vertical a ritmo elevado-. También cuenta con un spoiler trasero de corte similar que oficia de aerofreno a partir de 120 km/h.

Casi un modelo de carreras, logra unas prestaciones soberbias. La carrocería está íntegramente fabricada en fibra de carbono. Aunque carece de un techo practicable sí lleva en el maletero dos coberturas fijas desmontables para taparlo.

En consonancia con el purismo exterior, el habitáculo es minimalista y está decorado con apliques de carbono, aluminio y cuero de altísima calidad. También adosa una placa con la firma de Stirling Moss. Según la marca, este modelo cierra la actual generación SLR y supone una forma de agradecimiento a los clientes que han apostado por ella.


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