El Bentley Bentayga Mulliner brilla en Ginebra 2017
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Rubén Fidalgo
02 de marzo, 2017
El apellido del carrocero Mulliner siempre ha estado ligado a las creaciones más cuidadas de la marca británica y ahora lo hace en esta edición especial del Bentley Bentayga Mulliner que debuta en el Salón de Ginebra para robarle protagonismo a otro coche muy especial: el Mercedes G650 Landaulet.
Mulliner es el apellido de uno de los carroceros de más prestigio que solía vestir los chasis de marcas de lujo como Bentley. Desde que los propios fabricantes hacen sus carrocerías y poco a poco han ido desapareciendo los carroceros independientes, muchas marcas han tomado los nombres de éstos para denominar ediciones especiales, y Mulliner es ya un clásico entre los modelos de Bentley.
Para plantar cara a un modelo tan llamativo como el Mercedes Maybach G650 Landaulet, los de Crewe presentan en el Salón de Ginebra el Bentley Bentayga Mulliner , una edición especial que sublima el concepto de 4×4 de lujo gracias a su acabado artesanal y exclusivo.
Tomando como punto de partida el Bentley Bentayga, el departamento más exclusivo de la marca británica (actualmente perteneciente al grupo VAG) ha creado un todo terreno excepcional en el que cada detalle se ha personalizado de manera exquisita, como debe ser en un coche que lleve el apellido Mulliner.
Esta personalización empieza en el exterior, donde se ha elegido un acabado en dos colores que le da una imagen más esbelta y elegante al Bentayga. Por supuesto, los clientes podrán elegir la tonalidad de la pintura, la configuración de los dos tonos y todos los detalles bajo pedido. Las enormes llantas de 22 pulgadas ponen la guinda y le dan una imagen contundente y con ciertos matices deportivos.
En el interior también se puede personalizar absolutamente todo, desde el tipo de madera o material para las molduras hasta las costuras del cuero, de extraordinaria calidad, que reviste cada milímetro del suntuoso habitáculo del Bentayga Mulliner.
Gracias al equipo de audio Naim calibrado de forma específica para este habitáculo, el Bentayga se convierte en una de las salas de concierto más lujosas, cómodas y veloces del planeta. A este confort de viaje contribuye la suspensión adaptativa Bentley Dynanic Ride, que reduce el balanceo de la carrocería sin necesidad de recurrir a unos tarados de amortiguación demasiado rígidos.
Puesto que se trata de un modelo que se produce bajo pedido y según las especificaciones de cada cliente no hay precio para este modelo.
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