Audi, Volkswagen, Skoda
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Autor: Autocasión
22 de enero, 2008
La triple entente alemana quiere dejar huella este año. Para ello suma a las novedades presentadas en el Salón Internacional de Detroit, el nuevo Skoda Superb y el A4 Allroad.
El consorcio alemán comienza 2008 a toda máquina. A las novedades de Audi y Volkswagen en el Salón de Detroit, se une el nuevo Skoda Superb y el A4 Allroad que nosotros les mostramos en exclusiva. Quieren que éste sea su año.
AUDI A4 ALLROAD
Disponible hasta ahora únicamente en la saga A6, Audi ha decidido ampliar su concepto Allroad y dirigirlo un escalón más abajo, hacia el A4. Como ocurre con su hermano mayor, el A4 Allroad sólo estará disponible con carrocería Avant y lleva asociada la tracción total quattro para una máxima eficacia fuera del asfalto. De hecho este modelo se mostrará como una opción más campera y robusta que el futuro Q5, el SUV de Audi que verá la luz el próximo otoño.
Para ello el A4 Allroad incorporará suspensión neumática adaptativa con varios modos de actuación, un bloqueo electrónico del diferencial así como unas prácticas protecciones de acero situadas tanto en los bajos delanteros como traseros. Esta nueva versión de Audi saldrá a la luz el verano de 2009.
AUDI TTS
Pero antes de esto, a Audi le espera un 2008 también muy intenso. Coincidiendo con el décimo aniversario del lanzamiento del TT, la marca alemana sitúa en la línea de salida –se presenta en el Salón de Detroit– al nuevo TTS, el modelo estrella de la gama, y que estará disponible poco antes del verano tanto en carrocería coupé como roadster.
El TTS se distingue por unas llamativas llantas de 18 pulgadas y unos faros bi-xenón de nuevo diseño y luz de marcha diurna con LED. Pero sobre todo por el empuje del propulsor 2.0 TFSI qu
e llega a 272 caballos y un par máximo de 35,7 mkg constante entre 2.500 y 5.000 vueltas, valores con los que este deportivo alcanza los 250 km/h (autolimitada) y sólo necesita 5,2 segundos para pasar de 0 a 100 km/h. Este galardonado 2.0 TFSI recurre a la inyección directa y a la sobrealimentación para exprimir al máximo sus posibilidades.
Además, para adecuarse a sus nuevas prestaciones se han revisado aspectos como el bloque, la culata, los pistones, las bielas, el turbo y el radiador de aire de la sobrealimentación. El TTS monta una caja manual de seis velocidades o bien, en opción, un cambio automático de doble embrague S-Tronic con el mismo número de relaciones que es capaz de reducir el consumo respecto al primero. El cambio entre marchas es más rápido gracias a la incorporación de un nuevo depósito de presión.
La dinámica del modelo más potente de la saga TT queda avalada por la incorporación de serie del sistema de tracción total quattro que transmite con las máximas garantías toda la fuerza a la calzada. Además la versión TTS también presume de un sistema de amortiguación adaptativo «Audi Magnetic Ride». Esta tecnología permite variar el tarado de la suspensión mediante unas partículas magnéticas microscópicas que se encuentran en el fluido del amortiguador y que se estimulan a través de impulsos eléctricos. Así, el conductor puede elegir entre una conducción normal y otra deportiva. Al activar esta última la carrocería rebaja su altura 10 mm.
En el TTS Roadster la capota de lona y el deflector de viento se accionan de manera eléctrica (el techo necesita 12 segundos para replegarse en forma de Z) y la maniobra se puede realizar en marcha siempre y cuando no se superen los 50 km/h.
El TTS Coupé (2+2 plazas) estará disponible desde 44.900 euros mientras que el Roadster costará 47.750.
AUDI R8 V12 TDI CONCEPT
Detroit también es el lugar elegido por la marca de los aros para presentar un deportivo de altísimo rendimiento con ¡mecánica diésel! Se trata de un R8 en el que se apuesta por un brutal propulsor TDI V12 de seis litros cuyas cifras asustan: 500 CV de potencia y 1.000 Nm de par máximo (102 mkg). Un motor verdaderamente de carreras como indican sus prestaciones: 4,2 segundos en el 0-100 km/h y más de 300 km/h.
Los ingenieros han transmitido a este V12 TDI toda sus experiencia y los grandes éxitos acumulados recientemente en el mundo de la competición por el R10 TDI, ganador en las dos últimas ediciones de las 24 Horas de Le Mans. Sin embargo, en el motor 6.0 V12 TDI el ángulo entre las bancadas de cilindros no es de 90º, sino de 60º, reduciéndose así en parte los momentos de inercia de este tipo de construcción.
Extremadamente compacto para su cilindrada, también se ha estrenado un nuevo compuesto de fundición para la fabricación del cárter del cigüeñal, lo que ha permitido reducir en un 15% el peso y duplicar su vida útil. También se han modificado los inyectores piezoeléctricos de ocho orificios y se incorporan dos nuevas bombas de alta presión para el sistema common rail capaces de producir una presión de hasta 2.000 bares. También escalofriante es la presión ejercida por los dos turbocompresores (2,6 bares).
Para aguantar los elevados índices de potencia y par, este vehículo monta una robusta caja de cambios manual de seis relaciones, mientras que la tracción total permanente variable distribuye, en condiciones normales, un 60% de la fuerza sobre el eje trasero. Los frenos son de material cerámico.
La rigidez y ligereza de la carrocería y la aerodinámica también son dos aspectos meticulosamente estu
diados en el R8 V12 TDI Concept. La carrocería pesa sólo 210 kilos y es capaz de generar empuje descendente tras el intenso trabajo de los especialistas. Dicho efecto se consigue gracias a un spoiler trasero, ampliado respecto a la versión de serie, y que se despliega de manera automática. También se ha aumentado el tamaño de las chapas deflectoras laterales colocadas bajo la talonera y que conectan el difusor delantero con el trasero.
Otro detalle funcional es la toma de aire de tipo Naca, situada en el techo que propulsa el aire hacia el motor (recordemos que va situado en disposición central). El motor, por cierto, puede verse incluso en la oscuridad a través del cristal debido a una serie de diodos que iluminan el vano motor.
El Audi R8 V12 TDI Concept se presenta con un llamativo color Gracesilver que enfatiza su carácter marcadamente deportivo.
VOLKSWAGEN PASSAT CC
Volkswagen comienza el año con un estreno sonado que ha reservado sigilosamente
para el Salón de Detroit, que se celebra en estos días. La sorpresa llega en forma de nuevo Passat CC, el primer coupé de cuatro puertas de la marca alemana. Aunque quizás para evitar equívocos debería cambiar la nomenclatura CC, identificada en la mayoría de los casos con el concepto coupé-convertible.
De aspecto claramente más afilado que el resto de la familia, el Passat CC mide 4,796 metros, o lo que es lo mismo, 31 milímetros más que el Passat. También crece 36 mm en anchura y aumenta su pisada al crecer la cota de sus vías delantera (+11 mm) y trasera (+16 mm). Para reforzar su aspecto deportivo la altura sí disminuye hasta 1,42 metros. La capacidad del maletero alcanza los 535 litros.
Los ingenieros y diseñadores han trabajado para unificar el concepto deportivo de un coupé con la practicidad y el espacio interior de un sedán. Sus cuatro y amplias plazas ofrecen un confort digno de segmentos superiores. Un ejemplo son los asientos delanteros que ofrecen un sistema de climatización individual capaz de renovar el aire del interior y ventilar con suma eficacia para agrado del conductor en los meses más calurosos. Hasta ahora este «lujo» estaba reservado al Phaeton, el gran sedán de lujo de VW.
También es de destacar el generoso techo panorámico, que se extiende hasta los pilares B y que puede elevarse 30 mm para ventilar el interior. Pero las novedades no se quedan ahí. En las plazas traseras los pasajeros pueden accionar un mando capaz de oscurecer los cristales laterales y la luneta trasera impidiendo el paso de la luz hasta en un 65%, acción ideal para protegerse del sol o de las miradas de los más curiosos.
Abrumador resulta también el aporte tecnológico en materia de seguridad. Lo má
s novedoso es el denominado «Lane Assist». Esta tecnología es un sistema activo que evita que el Passat CC pierda la trayectoria por un descuido del conductor. Si el «Lane Assist» detecta alguna anomalía es capaz de actuar sobre la dirección y contravolantear para evitar una salida de la calzada, acción que, por cierto, se produce en un 14% de los accidentes que ocurren por un descuido. El sistema queda anulado si el conductor activa el intermitente.
También el Passat CC presume de un control dinámico del chasis (DCC) que ofrece la posibilidad al conductor de elegir entre tres menús de actuación: deportivo, normal y confort. De esta manera el tarado de las suspensiones varía en función del tipo de conducción elegida. El DCC también controla la asistencia de la dirección.
Otra perla de este modelo es la incorporación del «Park Assist», tecnología por la cual el vehículo es capaz de detectar los huecos de aparcamiento disponibles y con sólo apretar un mando realizar la maniobra de estacionamiento actuando sobre la dirección. El conductor sólo tiene que estar pendiente del acelerador y el freno.
Por su parte, el ACC (control de la velocidad de Crucero activo) permite que el VW Passat CC regule la velocidad y la distancia con el vehículo de delante de manera automática mediante un radar situado en el frontal. Además, en caso de existir riesgo de colisión avisa al conductor y actúa sobre las pinzas de freno, acercándolas a los discos para reducir el tiempo de reacción al realizar una frenada de emergencia.
Además, este nuevo modelo incorpora un tipo de neumático capaz de multiplicar por cinco la eficacia contra pinchazos. Esto se debe a una mezcla sumamente flexible del compuesto de la goma, capaz de encapsular el objeto que penetra y prácticamente sellar el orificio. Este sistema de seguridad se suma a otros como el ESP o los ocho airbag disponibles.
Por último, el Passat CC presumirá de cinco motorizaciones, dos diésel y tres más de gasolina. Entre las primeras se encuentra dos variantes del motor 2.0 TDI –de 140 y 170 caballos–, ambas con tecnología common rail. En gasolina, todos ellos dotados de inyección directa, la oferta comienza con un 1.8 TSI de 160 CV, le sigue un 2.0 TSI de 200 CV y concluye con el poderoso seis cilindros de 3,6 litros FSI y 300 CV (280 en USA), capaz de alcanzar los 250 km/h de velocidad punta y acelerar de 0 a 100 km/h en 5,6 segundos. Esta versión presume de tracción total 4Motion de serie.
Asociadas a estos propulsores se ofrecen cajas manuales o DSG de seis relaciones, amén de un cambio de nuevo desarrollo DSG de siete relaciones que estará disponible con el motor 1.8 TSI. El Passat CC llegará a Europa poco antes del verano y en otoño debutará en EEUU, Canadá y Japón.
SKODA SUPERB
La marca checa también aprovecha la llegada de 2008 para renovar su buque insignia, el Superb, vehículo líder en el segmento de las berlinas medias en espacio interior. El nuevo modelo alcanza ahora una longitud de 4,838 metros (+ 33 mm), también crece en cota de anchura (+ 18 mm) y, curiosamente reduce en casi 10 mm su altura y lo más llamativo, 44 milímetros la distancia entre ejes.
El diseño frontal del nuevo Superb se muestra algo más agresivo, destacando la nueva rejilla frontal, los faros de diseño tipo lágrima o un capó con aristas y perfiles más marcados. También los cambios estéticos son patentes en la zaga. Así, los grupos ópticos son ahora más amplios, van dispuestos en forma horizontal y la placa de la matrícula desciende desde el portón hasta el paragolpes.
También el aporte tec
nológico es muy superior en el nuevo Superb. Entre las novedades incorporará faros adaptativos, un nuevo sistema de climatización electrónico o un práctico sistema de aparcamiento asistido. La seguridad se refuerza con la incorporación de nueve airbag, incluido el de rodilla del conductor.
También generosa será la oferta mecánica, que en principio contemplará tres motores de gasolina y tres diésel con potencias de entre 105 y los 260 caballos. Skoda aprovechará el próximo Salón de Ginebra para presentar su nuevo modelo en sociedad.
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